El corazón indómito de África
Uganda es un lugar donde las montañas se elevan como plegarias, las colinas se escalonan en verdes imposibles, y la vida salvaje parece no tener fin. Aquí, la naturaleza se revela. Y lo hace sin multitudes, sin artificios, sin prisa.
Lejos de los circuitos más transitados, Uganda ofrece una experiencia de safari profundamente íntima. No hay fábricas de turistas ni rutas prefabricadas. Hay selvas que respiran humedad, senderos que se pierden entre la niebla, y encuentros que marcan. En el Bosque Impenetrable de Bwindi, los gorilas de montaña se dejan ver tras horas de caminata silenciosa, en un momento que no se olvida. En Kibale, los chimpancés juegan entre ramas como si el tiempo no existiera. Y en las llanuras de Queen Elizabeth, los leones trepadores vigilan desde lo alto, mientras los elefantes cruzan el horizonte con majestad.
Uganda es para quienes ya han escalado el Kilimanjaro, navegado el Okavango o seguido la Gran Migración, y aún buscan algo más. Algo que no se capture en una foto, pero que se quede para siempre. Aquí, los animales superan en número a los visitantes. Y eso lo cambia todo.